domingo, 14 de diciembre de 2025

MANDALA


 MANDALA




I

La desnudez del aire

y los cuerpos

como estrellas binarias.

Imposible prolongarse en el otro:

nos circundamos,

nos acordonamos,

pero estamos solos

(el sudor es  frontera).



II

Un volcán

se estaciona en mi pulso.

Oigo

como nace una rosa.

Soy una extraña criatura doméstica.

La que no cesa de arder

y promete

su poema como huella.



III

Hubo un andamio

entre soles

(el saludo del fuego

a todos los hijos vagabundos,

la mordedura del verano

sacudiendo las redes).

Las abejas volvieron

(espolvoreadas de viento).

Se calzaron

el zapato de cristal del mediodía.

Te toqué

(desde entonces la pólvora).



IV

Ángeles

pulsando

en las aristas de la sangre.

Pupilas que se rompen.

Grietas tibias

en la arcilla de los párpados.

Un cuerpo

que se deshace en la noche.

El traje del hombre amado

recostado en la lluvia.

La barca sosegada me transita.

Me desperté

con todo el mar en las venas.



V

Orbita

el cuerpo celeste.

Entonces la carne se circula.

Es un nudo de luz.

Hombre y mujer rodando.

Intemperie

donde caen los sentidos

mientras la luz apura

su vaso de constelaciones.






Del poemario "Once Upon A Time"  (2014)

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