YANELA
“Silenciosa y sin mirarme,
la muerte otra vez pasó
delante de mí. ¿Qué has hecho?
La muerte no respondió.”
Antonio Machado
Ella sonreía desde el abismo.
Como una poeta o una predestinada.
Caminaba un enjambre de sábanas injustas.
Repetía un temblor de bocas gastadas por el hambre.
Ella se decía como se dicen ciertos llantos.
Con un rumor de esperanza rota.
Adelgazando la voz hasta convertirla
en un estela de mariposas anestesiadas.
Ella pedía poco.
El pan, cada día.
El sol, a veces.
Una muñeca, un novio,
unas monedas para pasar la vida.
Nació para mujer y fue cordero.
Perfecto sacrificio a los dioses del barro,
coronita de espinas y de sangre.
Yanela Medina desapreció de su casa, en Berazategui, el 23 de febrero de 2013. Pocos días después, su cadáver fue encontrado, embolsado, flotando en un arroyo. La autopsia reveló que Yanela, de 11 años, murió desangrada como consecuencia de un empalamiento luego de un ataque sexual en el que participaron varias personas. Por su crimen fueron detenidos cuatro jóvenes de entre 18 y 21 años.
Quien hace honor a su género y sexo... violando en manada... Quien mata empalando a una niña, igualita que sus hermanas... quien se puede decir luego hombre, quien y quien luego de violar cobardemente y asesinar cobardemente en manada puede besar con amor esos labios que asesinaron macabramente a una niña? ¿Qué mujer puede tener hielo en el alma por tener un orgasmo con filo de navaja en la memoria, un palo en la mente y en la entrepiernas un arma asesina?
ResponderBorrarEs inconcebible, Carmen. Monstruos son, no hombres.
Borrar