ESE
HOMBRE NO
Ese hombre no.
Ese hombre no me puso la mano encima.
Ese hombre no alborotó el avispero,
no me arrancó la ropa, el pellejo,
la voluntad redonda de los muslos.
Ese hombre no.
Ese hombre no me partió en dos.
Ese hombre no le dio órdenes a mi sangre,
no cavó una trinchera entre mis piernas,
no fusiló mariposas en mi ingle.
Ese hombre no supo ni mi norte y ni mi sur.
No me tocó el pelo
cuando desparramé el hambre en sus sábanas.
Desnuda.
Ese hombre no
Lo niego.
Negarlo es mi evangelio.
¿En qué carne morder para borrarlo?
Ese hombre no.
Ese hombre no me puso la mano encima.
Ese hombre no alborotó el avispero,
no me arrancó la ropa, el pellejo,
la voluntad redonda de los muslos.
Ese hombre no.
Ese hombre no me partió en dos.
Ese hombre no le dio órdenes a mi sangre,
no cavó una trinchera entre mis piernas,
no fusiló mariposas en mi ingle.
Ese hombre no supo ni mi norte y ni mi sur.
No me tocó el pelo
cuando desparramé el hambre en sus sábanas.
Desnuda.
Ese hombre no
Lo niego.
Negarlo es mi evangelio.
¿En qué carne morder para borrarlo?
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