NIÑO HAMBRE
Niño hambre,
ojos desmesurados abiertos al vacío,
a la ausencia de cielo,
al modesto milagro del mendrugo.
Niño hambre,
ojos desmesurados abiertos al vacío,
a la ausencia de cielo,
al modesto milagro del mendrugo.
El vientre hinchado es un planeta sórdido
en torno al cual ávidas moscas
se erigen satélites siniestros.
La boca amarga es un pozo oscuro
negado a la sonrisa,
a la palabra lúdica y al canto
fluido de la infancia.
Niño hambre,
apenas un susurro,
un gemido en el viento,
las tripas que crujen como hojas
de un espantado otoño.
Y la muerte que llega sin remilgos
y le toma la mano.
Y lo convierte en un número más,
en una fría estadística.
y le toma la mano.
Y lo convierte en un número más,
en una fría estadística.
El hambre, en general, es una vergüenza para toda la Humanidad.Y si es un niño, su mirada nos seguirá a todas partes. Gracia Raquel, porno callar.
ResponderBorrarMARITA RAGOZZA
Coincido, Marita! Un abrazo!
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