domingo, 31 de mayo de 2015

PALABRAS PARA LA CEREMONIA DE ENTREGA DE PREMIOS DEL 2º CERTAMEN NACIONAL "FAJAS DE HONOR" - SOCIEDAD DANTE ALIGHIERI DE TAFÍ VIEJO

PALABRAS PARA LA CEREMONIA DE ENTREGA DE PREMIOS DEL 2º CERTAMEN NACIONAL "FAJAS DE HONOR" - SOCIEDAD DANTE ALIGHIERI DE TAFÍ VIEJO


En setiembre de 2010 me tocó atravesar uno de los peores momentos de mi vida. Mi hermano Daniel, de 39 años, falleció sorpresivamente. Tenía la misma edad que mi padre cuando murió y, como él, tuvo un infarto.  Mi hermano Daniel, mi chiquito, mi compinche en la infancia y, por supuesto, mi “protegido”.   Fue un golpe terrible para toda la familia, especialmente para mi madre.  Ella pasó a ser mi “protegida” entonces. Tuve que hacer mi duelo sosteniéndola. E hice mi duelo, principalmente, a través de la palabra. Los poemas que componen “Hermano” fueron escritos en una época muy difícil y son el testimonio de lo que nos pasa y lo que le pasa a nuestras vidas cuando perdemos a un ser muy amado. Y son, también, la necesidad de seguir apostando por la vida.
El libro fue publicado en el año 2012, gracias a la obtención del 1º Premio en el 1º Concurso de Poesía organizado por “El Mensú”, una editorial de Córdoba. “Hermano” es, sin dudas, mi poemario más querido y el que más significa para mí. Lo publiqué con el  anhelo de dar a conocer los poemas, por supuesto, pero también como cierre de una etapa dolorosa. Y, sobre todo, con  la intención de que algo quedara en el mundo de ese hermano mío, solterón sin remedio, transitando la vida siempre por ese “caminito al costado del mundo” del que habla el rock.
Les agradezco profundamente que hayan distinguido “Hermano” y lamento no poder acompañarlos en esta fiesta de la poesía.  Para mí es un enorme honor haber sido distinguida junto a escritores enormes cuya obra conozco y admiro. Agradezco, también, el trabajo diario a favor de la palabra.
Mis más cariñosos saludos a todos. 

RAQUEL FERNÁNDEZ


jueves, 28 de mayo de 2015

NATALIA II - #NiUnaMenos

NATALIA II


“Y añoré
mi pelo suelto, mis zapatos bajos,
mi abrigo deportivo,
mi tez morena, solamente el agua.”
María Elvira Lacaci



Los viejos se mueren de viejos,

se mueren de solos,
se mueren de tener lejos el mar
y no palpar verano
en las arrugas de las voces que decrecen.
Vos no.
Vos no sabías
del olor amarillo de las cartas
rubricadas por las sombras
ni de los fantasmas recurrentes
que amplifican
las crudas llagas de junio.
Vos olías arena
gratinada  de sal  y soles ambiciosos,
inspirabas océano
y exhalabas gaviotas.
Vos tenías quince años.

Donde habitaba tu cuerpo promisorio,
tu matriz venidera,
tu ritmo de almanaques y de sangre
propiciándote nido
sólo queda
un plato de tristeza que se pudre.

Los viejos se mueren olvidando
por qué deseaban tanto no morirse.
Vos no.
Vos te moriste interrumpida.
Por eso no acabamos de enterrarte.

Nunca.

  
Natalia Melmann fue encontrada muerta el 8 de febrero de 2001 en un sector de difícil acceso del vivero municipal de Miramar, Buenos Aires, un predio de casi 600 hectáreas plagado de bosques de pinos, y en una zona que ya había sido rastrillada por la policía. Había desaparecido cuatro días antes, a la salida de una discoteca. La chica  se había negado a participar de una fiesta organizada para festejar el cumpleaños del comisario de Miramar y fue torturada, violada y asesinada por cuatro hombres: Gustavo "el Gallo" Fernández y los policías Oscar Echenique, Ricardo Suárez y Ricardo Anselmini. Natalia tenía 15 años. 




Arte: Pablo Bernasconi


lunes, 25 de mayo de 2015

LUCILA - #NiUnaMenos


LUCILA

“Como una niña de tiza rosada en un muro muy viejo súbitamente borrada por la lluvia.”
Alejandra Pizarnik


Ascendía en  sus ojos
la espléndida nostalgia de un poema
pero ella lo ignoraba.
Se asumía
destinada a la vida,
a su trajín de fresas y tormentas,
a su rutina casi milagrosa
de médula y saliva.
La unción de los jardines  crecía en sus recodos,
en sus dulces misterios,
y ella tan ajena.
No había aprendido a desnudarse.

Una mano de bruma
(de error, de podredumbre)
le encadenó a la sangre un cascabel de Muerte.
Pero ella fue más alta que el hueso del espanto.

Ascendía en sus ojos
la espléndida nostalgia de un poema.
De Girondo, seguro.
Yo creo que era un ángel.



Lucila Yaconis fue asesinada el 21 de abril de 2003 en un intento de violación, en un paso a nivel del barrio porteño de Núñez. Tenía 16 años y, en el momento de ser atacada, volvía del colegio. Su madre, Isabel Yaconis,  se convirtió en un referente de la Asociación de Madres del Dolor reclamando la creación de un registro de violadores. El asesinato de Lucila aún continúa impune.





Isabel Yaconis, mmá de Lucila Yaconis



sábado, 23 de mayo de 2015

CHIARA - #NiUnaMenos


CHIARA

"Hay que mirar los niños en la flor de la muerte floreciendo, 
luz untada en los pétalos nocturnos de la muerte."
Jaime Sabines


Ella era

la fácil desnudez de la inocencia

poniendo un pie afuera de la infancia.

La carne jugando a ser deseo.

La piel agradeciendo

la plegaria del aire.



Soñaba que el amor

era nadar a contramuerte.



Soñaba que el amor.



No presagió una danza inmóvil

de tendones marchitos.

No calculó el culto a la ceniza,

la mentira,

la mordedura opaca

de las segundas intenciones.



Ella no supo el primer golpe hasta que el miedo

le degolló los pájaros del alma.



Ella era

el paladar del sol

desordenando el cuerpo.

Blandiendo dientes como jazmines blancos.

Enarbolando piernas.

Hoy es, apenas,

una pequeña estatua de clausura.

Las vértebras de azúcar diluidas en nada,

los ojos empapados de intemperie.



¿O son lágrimas?



¿O es sangre?





Chiara Páez desapareció  el 10 de mayo de 2015 a la madrugada en la localidad santafesina de Rufino. Su cadáver fue hallado horas más tarde, enterrado  en el patio de la casa de su novio de 16 años, quien confesó el crimen y fue detenido junto a su madre y su padrastro. Chiara tenía 14 años y estaba embarazada.




jueves, 21 de mayo de 2015

IX FESTIVAL INTERNACIONAL DE POESÍA PALABRA EN EL MUNDO



SADE Seccional Surbonaerense en el Festival 
"PALABRA EN EL MUNDO"

23 de mayo, a las 17,00 en Gente de Arte, Alsina 234, Avellaneda

martes, 19 de mayo de 2015

ÁNGELES - #NiUnaMenos


ÁNGELES

“No comáis a los niños de los otros.
Pues su carne se pudrirá en vuestras bocas bien provistas.”
Joyce Mansour

  
Otra vez te estoy hablando de ella. 

Chicainterrumpida  con una bolsa negra vistiéndole la muerte. 

Chicainterrumpida con  un nudo de peces rojos deshecho ente las piernas. 

Con un hilo de hormigas pavorosas zurciéndole la garganta. 

Interrumpidainterrumpidainterrumpida.



Ella no se tatuó una golondrina en el pubis. 

No tuvo un trabajo rutinario. 

No leyó a Chejov. 

No paseó con su amante por el Puente de Brooklyn 

(ni siquiera en sueños). 

No tuvo un amante.

  

Otra vez te estoy hablando de ella. 

La nena de acá a la vuelta, 

la hija de un amigo, 

la chica que buscaban en la tele. 

Interrumpidainterrumpidainterrumpida. 

Convertida en un objeto para desarmar. 

(para desamar). 

Sentenciada a una habitación sin puertas ni ventanas, 

a una travesía inmóvil, 

a un perpetuo monólogo de tierra. 




Ángeles Rawson desapareció en Palermo, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el 10 de junio de 2013 y fue encontrada al día siguiente, asesinada de forma brutal,  en una planta recicladora de residuos urbanos (CEAMSE). La investigación del trágico hecho tiene como único imputado a Jorge Mangeri, el encargado del edificio en el que vivían la adolescente y su familia.  Ángeles tenía 16 años.




Jimena Mery Aduriz, mamá de Ángeles Rawson




domingo, 17 de mayo de 2015

WANDA - #NiUnaMenos

WANDA
“Ponle tus cabellos escarchados por el fuego
Abrázalo pequeña estatua de terror.”
Alejandra Pizarnik


Arde el poema,
arde
en la cornisa de unos labios resecos,
en el filigrana de un corazón
que se trepa al humo de las palabras.
Debajo de la cintura del mediodía
arden los insectos atravesados
por el aguijón del otoño.
Es el tiempo en el que las mariposas van sobrando
y caen
como sutiles hojas huérfanas de árbol.


En el gesto de un espejo que multiplica el hastío
arde
la salvaje intención de las premoniciones.
Ella abre un tragaluz en su cabeza:
cielo, cerro, camino, ferocidad de verde.
Pero la  carne le cierra todas las ventanas
en su lenguaje dolido de fuego.


Arde una mujer y nadie sabe
cuántos sueños arden con ella.




Wanda Taddei fue atacada en la madrugada del 10 de febrero de 2010 por su esposo, el músico Eduardo Vázquez, quien luego de rociarla con alcohol, le prendió fuego con un encendedor, causándole gravísimas quemaduras que desembocaron en su muerte, once días después. Este crimen brutal puso de relieve la violencia de género y la gravedad del femicidio en Argentina. La difusión del caso también causó la multiplicación de ataques similares a otras mujeres,  fenómeno que se  denominó "efecto Wanda Taddei".









Jorge Taddei, papá de Wanda Taddei






Beatriz Regal, mamá de Wanda Taddei



viernes, 15 de mayo de 2015

LOLA - #NiUnaMenos


LOLA

“Mañana
me vestirán con cenizas al alba,
me llenarán la boca de flores.”
Alejandra Pizarnik



No, no me vas a convencer.

Las mujeres no nacemos

para ganarnos,

a los quince años,

un par de alitas de papel de arroz.

Para vaciarnos de cardúmenes rojos

y repletarnos

de velones y rosarios de plástico.

Para obtener el status de estampita

y quedarnos inmóviles.

Para siempre.

Para siempre.



A los quince años los ojos fracturados como un paraguas herido de viento, no.

La mordedura letal de la arena y el sol como verdugo, no.

El miedo tejiendo nubes de vidrio que se rompen al respirarlas, no.

(El verano es un caballo azul que sangra

porque mi cuerpo

es una llaga abierta en su lomo absoluto).



Un angelito más en el cielo.

Y en la tierra, ¿qué?

En la tierra algo que se quiebra,

(una mujer que no será

o un pájaro),

el lobo omnipresente

y el horror de saber que el bosque crece,

sin paréntesis,

como un tumor de sombra.





Lola Chomnalez fue hallada muerta en el balneario Barra de Valizas de Uruguay el martes 30 de diciembre de 2014 tras estar dos días desaparecida. Había salido a dar una caminata por la playa a primeras horas de la tarde. Por su asesinato no hay ningún detenido. Lola tenía 15 años. 





Diego y Beatriz Chomnalez, padre y abuela de Lola Chomnalez





Adriana Belmonte, mamá de Lola Chomnalez


miércoles, 13 de mayo de 2015

YO VUELVO - #NiUnaMenos


YO VUELVO

A todas



Yo soy el verbo dolorido

que conjugaste a golpes.

El ángel que  pudrió su desnudez

en una bolsa de basura.

La flor que tiraste en una zanja,

en un pozo,

en un agujero de terror y asco.

La madre que prendiste fuego.



 Yo no estoy muerta, no. 



Yo vuelvo.



Me limpio la sangre de la boca

con el beso de todos.

Me sacudo las arañas del pelo.

Me arranco de los ojos

la ceguera del barro.

Rehago mi  matriz escarnecida,

desbarato el eclipse prematuro

que mancilló la luna de mi sexo.



Yo no estoy muerta, no.



Yo vuelvo.



Enciendo un cigarrillo.

Me río con el chiste que me contó una amiga.

Me pruebo algún vestido.

Tarareo una canción para mis hijos.

Me acurruco en la tibieza de mis padres.

Acaricio a mi perro.

Soy yo y soy todas las mujeres.



Soy yo de pie.



Yo vuelvo.

  


Arte: Liniers   


viernes, 8 de mayo de 2015

OBSESIÓN


OBSESIÓN 



Tu boca se aviva,

vacila, 

ondea. 

Suma un eslabón a mi deseo. 

Pequeño juguete 

simulador de luz 

me golpea, 

me incita. 



La tomo en mi mano, 

dispongo la sonrisa. 

Entonces 

descarrilan los trenes, 

los barcos se desbandan

y no sé 

dónde dejé mi cuerpo 

(el recinto errático del sexo, 

su mensaje no dicho). 



Tu boca  me perturba 

y me predice. 

La sonrisa 

se instala en mi cabeza. 

Nunca se va.

Nunca.



Imposible escapar de su conjuro 

con el recurso de la lejanía.



Arte: "Sugar honey vengeance baby", Tania Marmolejo


Poema publicado en la revista "LAK-BERNA" Nº 6